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DEVELOPER: Generali Italia, Arthemisia
ÁREA TOTALE: 800 m2
LUGAR: Roma
© Diego De Pol

Nesite en el proyecto de restauración del Palacio Bonaparte de Roma

Generali Italia, en colaboración con Arthemisia, ha transformado el Palacio Bonaparte de Roma con un importante proyecto de restauración, creando un centro de arte y belleza.

Con unos tres mil metros cuadrados de espacios ricamente decorados y un distintivo balcón con vistas a la Plaza Venecia, el Palacio Bonaparte es un precioso símbolo de la historia de Roma, obra del arquitecto Giovanni Antonio De Rossi.

Construido en el siglo XVII y propiedad de Generali Real Estate SGR desde principios de la década de 1970, el Palacio ha sido sometido recientemente a una restauración completa, que ha durado 12 meses, renovando y optimizando sus espacios desde el punto de vista funcional y logístico, respetando plenamente los elementos arquitectónicos, históricos y decorativos preexistentes.

El minucioso proyecto de renovación, que afectó principalmente a las tres plantas superiores del edificio, fue supervisado por Studio Pras y la empresa D’Adiutorio, que se encargó de la construcción con el apoyo de la Superintendencia Especial de Arqueología, Bellas Artes y Paisaje de Roma.

El objetivo del ambicioso proyecto era devolver al edificio su esplendor original, para transformarlo en un centro museístico a disposición de la comunidad, como parte del plan plurianual Valore Cultura de Generali.

el suelo elevado de vidrio

Crear un itinerario expositivo capaz de garantizar la seguridad de los visitantes, proteger el pavimento preexistente de singular belleza y, al mismo tiempo, no contaminar el lenguaje neoclásico de las salas, estas son las premisas que han llevado a la instalación del suelo elevado de vidrio extratransparente Nesite.

La estructura portante sobre la que descansan los módulos de vidrio, protegida y reforzada por un borde de ABS, está formada por columnas y travesaños regulables de acero anodizado anticorrosión. El perímetro de los pabellones, en cambio, está enmarcado por pasarelas de cristal opaco que, al ocultar el paso subyacente de los cables eléctricos, de red y de aire acondicionado, han simplificado la instalación de los sistemas y las posteriores labores de inspección y mantenimiento. Los módulos

LED integrados en la estructura de acero del suelo han permitido entonces crear una atmósfera cálida y etérea, y realzar las preciosas decoraciones de los suelos. La ausencia de trabajos de albañilería, así como la máxima flexibilidad en la gestión de los módulos individuales, su movimiento y su sustitución, han hecho del sistema elevado la elección ideal para preservar el casco del siglo XVII y cumplir con los estrictos requisitos de un límite complejo.

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